El Lenovo Tenerife no pudo prolongar su buena racha liguera al caer este domingo en su visita al Valencia Basket (98-73), en un partido donde nunca estuvo cómodo. El equipo aurinegro se vio superado por un adversario muy físico, más intenso y acertado que los insulares.
Un mal día en el triple (7/26) y el dominio bajo tablero del conjunto taronja condenaron a una escuadra, la canarista, que no encontró el ritmo adecuado para sus intereses y acabó sufriendo una derrota clara.
El conjunto tinerfeño, que echó en falta las ausencias por lesión de Jaime Fernández, Aaron Doornekamp y Sasu Salin, no pudo salir airoso ante un rival directo, que aprieta más si cabe la zona media alta de la clasificación ACB: hasta cuatro equipos, con 19 victorias cada uno, incluido el lagunero, ocupan ahora los puestos del cuarto al séptimo.
Arrancó el pulso con una declaración de intenciones del Valencia, que sacó de entrada un quinteto muy físico y con muchos centímetros (Jones, Ojeleye, Anderson, Pradilla y Davies), lo que se tradujo en varios balones al poste bajo y en segundas opciones en ataque (hasta cinco rebotes ofensivos de los locales al cierre del primer cuarto).
Pese a la superioridad atlética de su rival y al buen inicio de Ojeleye, con once puntos en apenas ocho minutos, el Canarias trató de equilibrar la balanza moviendo el balón con criterio, al son de Marcelinho Huertas, y aprovechando los chispazos de Kyle Guy para evitar que los anfitriones se fueran en el electrónico (19-15, min. 10).
El caso es que conforme crecía el choque al Lenovo Tenerife le costaba jugar con el ritmo y la fluidez deseadas, al tiempo que el conjunto taronja amagaba con abrir brecha: 34-22 (17'), tras triple de Harper y una desventaja de diez puntos al descanso (43-33).
Tras el paso por vestuarios, la defensa asfixiante de Justin Anderson sobre Marce en las tres primeras acciones de la reanudación acabaron con el brasileño en el suelo y fueron un golpe importante para los aurinegros, que encajaron un parcial de 8-0 para tener que remar entonces siempre a contracorriente.
Lo intentó el Canarias planteando defensas zonales con el objetivo de minimizar daños y buscar meterse como sea en partido, pero no hubo manera de parar a un adversario que ganó en confianza con el paso de los minutos para llevarse la victoria de manera contundente. Toca corregir errores, pasar página y recomponerse para ir con todo a por el próximo reto: la Final Four de la Basketball Champions League.
-- Pinchar AQUÍ para ver las estadísticas | Fotos de Miguel Ángel Polo (ACB Photo)
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