Las pupilas de David Quintana volvieron a ganar a domicilio (1-2). La UD Taburiente controló perfectamente el encuentro en Madrid ante el CH Pozuelo. Con esta victoria, las amarillas suman cuatro triunfos seguidos y se acercan cada vez más a su objetivo de esta temporada
Imparable se queda corto. La UD Taburiente demuestra el gran momento en el que se encuentra con la última victoria en Madrid ante el CH Pozuelo. Las amarillas están muy motivadas y con ganas de seguir sumando a la clasificación para llegar a lo más alto. Las buenas sensaciones y el compromiso de las jugadoras con el equipo, hacen de la UD Taburiente una escuadra insuperable muy difícil de batir.
Adaptación y dominio a partes iguales
La UD Taburiente arrancaba el encuentro intentando imponer su juego desde el principio. Las pupilas de David Quintana no estaban del todo cómodas en el campo y eso se notaba. Como consecuencia de algunas irregularidades del terreno, la bola picaba mucho en el verde y no se movía lo rápido que querían las amarillas. Los minutos corrían y el conjunto insular intentaba poco a poco adaptarse al juego y a las condiciones externas. La UD Taburiente no estaba pudiendo realizar el juego que a ellas les gusta y en el que son las mejores, juego rápido con pases imparables en profundidad.
Las amarillas trabajaban sin descanso para dominar el juego en Madrid pero no lo estaban consiguiendo. No estaban consiguiendo adaptarse al verde y eso les estaba poniendo nerviosas. El combinado de David Quintana empezaba a estar frustrado, las insulares querían jugar en velocidad pero no podían. Al final del primer cuarto, la UD Taburiente empezaba a mejorar, ya se había adaptado y mostraba su gran dominio y calidad de juego. A sólo treinta segundo de acabar el primer tiempo, en una gran jugada, la escuadra amarilla estrenaba el marcador de la mano de Julieta Andrea Ceballos (0-1).
El segundo cuarto comenzaba con la misma tónica de partido. La UD Taburiente dominaba el encuentro, imponiendo su juego en el Valle de las Cañas. Las madrileñas prácticamente no se acercaban al área amarilla. Las de David Quintana estaban muy bien tanto en ataque como en defensa, el CH Pozuelo no podía avanzar para armar un ataque con posibilidades. Transcurridos los primeros minutos, las grancanarias iban encontrándose cada vez mejor, estaban más tranquilas y más cómodas en el campo. Era la oportunidad para subir un poco el nivel y afianzar el resultado en el eléctrico.
A los treinta y dos minutos de encuentro, de nuevo, Julieta se inventa una maravillosa jugada que acaba dentro de portería (0-2). La amarilla sumaba ya dos goles más a su casillero personal. Tras el gol, la UD Taburiente volvía a encontrarse un tanto incómoda. La frustración por el terreno volvía a aparecer. David Quintana se veía obligado a ir haciendo cambios para mejorar esta situación. El encuentro se iba al descanso con una ventaja de dos goles para las amarillas.
Una UD Taburiente luchadora y dominadora
Tras el descanso, las de David Quintana salían a tope. Notaban su superioridad en el marcador y querían ir a por el tercero para consolidar un poco más la victoria en Madrid. La UD Taburiente se encontraba bien, motivada y comprometida con el triunfo. Tras unos minutos de control amarillo, las madrileñas consiguen reducir la ventaja en el eléctrico. En un fallo de salida de bola de una de las defensas insulares, el CH Pozuelo se encuentra la bola y consigue provocar un penalti-córner con mucho acierto que sube al marcador (1-2).
Pese al gol madrileño, las insulares estaba cómodas. Todavía tenían una ventaja de un tanto más y querían aprovecharlo. La UD Taburiente no cesaba en su empeño de agrandar la distancia en el eléctrico e iban al ataque constantemente. El CH Pozuelo estaba haciendo una grandísimo papel en defensa para contener al equipo grancanario.
El último cuarto del encuentro fue muy largo para las madrileñas. Las pupilas de David Quintana habían salido más guerreras que nunca, decididas a seguir anotando. Durante el último tiempo, las amarillas tuvieron muchísimas ocasiones. La UD Taburiente provocó tres penalti-córners para transformar pero no pudieron hacerlo. Las chicas insulares no tuvieron éxito en su ejecución y las madrileñas lo frenaron todo. Además, la grandísima Julieta Ceballos volvió a tener otra ocasión clarísima de gol que finalmente no subía al marcador.
Al final del cuarto, Sofía Rogoski protagonizaba otra oportunidad clara que tampoco puede materializar. Pese a todo, al final, la UD Taburiente cosechaba su cuarta victoria consecutiva y hacía los deberes para conseguir su objetivo final esta temporada, estar entre los cuatro primeros de la tabla.
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